Aumentamos nuestra colección de aves con un ejemplar de Busardo ratonero.
Nos hemos traído los prismáticos a nuestros campos en Donín y no para espiar vecinos (no tenemos). Es un privilegio contar con Alicia dentro del equipo. Como sabéis, además de cuidar las plantas que luego disfrutarás en nuestras infusiones, es una especialista en detectar y analizar los animales e insectos que rondan nuestros cultivos. Gracias a ella descubrimos que nuestros campos están llenos de vida. Este mes os presentamos a este vecino, un busardo ratonero. ¡Prestemos atención a lo que nos cuenta Alicia!
Una de las aves rapaces que habitualmente surcan nuestros cielos son los ratoneros (Buteo buteo).
Se trata de una rapaz de tamaño medio, aspecto rechoncho cuando está posada, y en vuelo, alas redondeadas y cola corta y ancha que les permite planear jugando con las corrientes de aire. Su plumaje, de color marrón con motas bancas sobre todo por la parte inferior, varía mucho de tono, pudiendo oscilar desde una coloración bastante clara a un pardo muy oscuro.
Posee buenas armas con las que desgarrar a sus presas. Su pico es corto y está curvado hacia abajo, lo que le da una forma de gancho. Sus patas acaban en unas fuertes garras provistas de unas afiladas uñas.
Antes de la primavera se pueden ver parejas de ratoneros haciendo vuelos en conjunto. A partir de abril, tiene lugar la puesta, en un nido construido por ambos progenitores. Cuando nacen, ambos alimentan a la prole, que son, de media, 4 pollos. Lo hacen hasta el verano, cuando realizan sus primeros vuelos. Una vez que completan su desarrollo y se alimentan por ellos mismos, se independizan en busca de un territorio nuevo.
Esta ave vive ligada a los bosques, donde construye su nido. Pero siempre cerca de terrenos abiertos, prados, campos de cultivo, donde obtiene su alimento. Prefiere los paisajes en mosaico, donde alternen áreas desarboladas con bosquetes.
Es muy frecuente verlos en los bordes de las carreteras, posados en los postes del tendido eléctrico o sobre cercados.
Su dieta es muy variada. Come desde lombrices e insectos, pasando por micromamíferos, conejos, aves pequeñas, anfibios, reptiles, y hasta carroña. Los ratones son sus principales víctimas, llegando al 50% de su dieta en la época de cría.
Gracias a su carácter oportunista y a su adaptabilidad hacen que esta especie prospere con gran éxito en nuestros campos. Pero hace algunos años se vio afectada por la caza ilegal, ya que los cazadores lo consideraban perjudicial para sus propios intereses cinegéticos. A mayores, los tendidos eléctricos, los atropellos y los envenenamientos causan numerosas muertes.
En Donín, su presencia es diaria. Ya sea volando por encima de nuestras plantaciones, posados en los postes del teléfono o escuchando su característico reclamo. Cerca de nuestras instalaciones anida una pareja que cría todos los años varios pollos. A finales de verano, cuando los pollos empiezan a volar pero no son capaces de cazar, sus chillidos son constantes pidiéndoles a los padres comida.
Para Orballo y la agricultura en general es un placer tenerlos cerca, ya que así se mantienen a raya las poblaciones de roedores que podrían afectar a los cultivos, sin aplicar ningún tipo de biocida y de forma sostenible.