Si duermes mal o no eres capaz de conciliar el sueño, no te sientas mal. Existen estudios que indican que aproximadamente la mitad de la población tiene algún problema de sueño. Sin embargo, no todo está perdido. En la mayoría de los casos se pueden aplicar técnicas o protocolos que ayudan a mejorar la calidad de nuestro sueño. Queremos compartir contigo algunas infusiones y consejos para dormir que nos han funcionado de maravilla.
Lidiando con las emociones
Lo primero es ser consciente de tu situación mental. Y no nos referimos a que te hayan diagnosticado estrés o angustia. Las emociones que se generan a lo largo de nuestro día tienen un gran impacto en nuestra actividad cerebral mientras descansamos (o lo intentamos).
Cuando te despiertes tras haber dormido mal, pregúntate: ¿He discutido con alguien? ¿He estado preocupado en algún momento? ¿Me han dado una mala noticia?
Aunque creamos que tenemos una personalidad estóica, impasible, fuerte… lo cierto es que estas emociones que generamos pueden jugarnos una mala pasada nocturna. Por eso es muy importante tener un equilibrio mental que te permita gestionar tus emociones. Y eso… eso solo se puede entrenar con ayuda de profesionales. Contacta con tu profesional de la psicología y… ¡A entrenar!
La rutina es tu aliada
Puede parecer poco importante, pero el hecho de levantarte y acostarte todos los días a la misma hora ayuda a tener un mejor sueño. Aquí es muy importante contabilizar toda el proceso de sueño, el cual no se limita a 8, 5, o 12 horas. Hay que tener en cuenta las horas preparatorias. Las personas tienen por costumbre establecer su horario en base a las citadas 8 horas de sueño, pero la duración de tu sueño va a depender muchos factores como actividad física, emocional, dieta…
Te recomendamos que empieces tu rutina (ritual) de sueño 2 horas antes de irte a la cama.
¿Cómo iniciar un ritual de sueño?
Luces, cámara,…. ¡Acción!
Dos horas antes de irte a la cama elimina toda pantalla y tecnología. Las pantallas emiten luz azul y esta tiene varios efectos en tu organismo. Algunos efectos son positivos, pero en cuanto a sueño se refiere… lo cierto es que no ayuda. Puedes descubrir sus efectos en este artículo. ¿Te gusta quedarte en cama respondiendo ese último mensaje? Convéncete de contestarlo 2 horas antes, pues ya has empezado a ¨dormir¨.
Apaga tu cerebro
Durante todo el día acumulamos pensamientos, inquietudes o preocupaciones que estimulan nuestro cerebro. Aunque no seamos conscientes, nuestro cerebro es como una máquina que acumula inercia y no se puede parar en seco. Imagina un coche circulando a toda velocidad, va a tardar un tiempo en detenerse si lo frenamos. Pues eso mismo es lo que tenemos que hacer con nuestro cerebro. Utilizar técnicas de meditación es casi obligado si tenemos una actividad intelectual o emocional alta. Hay multitud de técnicas de meditación y todas se centran en el mismo objetivo: apagar tu cerebro eliminando cualquier pensamiento. Te dejamos este link con multitud de técnicas para que escojas la que mejor se adapte a ti.
Una infusión ayuda
¿A quién no le han dicho que un vaso de leche ayuda a conciliar el sueño? Pues efectivamente ayuda, aunque no es por la leche. En realidad, lo que nos ayuda es la temperatura. Tomar algo calentito nos ayuda a relajarnos y por ende, a estar más propensos a conciliar el sueño. A muchas personas un baño de agua caliente también les funciona.
¿Por qué tomar una infusión? Además de relajarnos con algo caliente, existen multitud de plantas con propiedades relajantes. Así que te harán efecto por partida doble. Al final de este post te dejamos unos artículos que hemos escrito sobre plantas relajantes. Puedes disfrutar de nuestras infusiones con estas propiedades:
Aburrirse es sano
Si ves que aún así te cuesta, que tu cerebro sigue como ese coche del que hablamos, que no se da detenido; no desesperes. Vamos a aburrir a tu mente. Actividades monótonas, sencillas, que no requieran un gran esfuerzo intelectual, son beneficiosas para conseguir esa desconexión de la que hablamos. Puedes coger un lápiz y sudoku, leer un libro denso (sapiens 100% efectividad comprobada) o cualquier otra acción que no te excite las neuronas. ¡OJO! Aquí no vale leer libros de autoayuda o empresa que te pongan a tope, tampoco tomarse el sudoku como un reto que hay que terminar para conseguir el trofeo de campeón mundial del recuadro. Simplemente… desconecta.
El equipo de sueño importa
Uno de nuestros consejos para dormir es invertir en el equipo de sueño. Para ello lo mejor es ponerse en manos de profesionales del descanso. Ni os imagináis la tecnología que hay detrás de un colchón o una almohada… Dureza, altura, textura, temperatura,… Todo un temario que hay que tomarse en serio si queremos descansar de forma adecuada.
Aquí nos hemos topado con una marca que nos flipa. Se llama Kipli y tiene todo lo necesario para dormir. Almohadas, colchones, nórdicos… Y lo que es más importante, fabricación UE y respetuosos con el medio ambiente y las personas. ¡Todo un Orballo match!
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